La llegada a Barcelona
Horas y horas sin dormir, cruzando provincias y provincias de madrugada, para amanecer al lado del mar. Muy bonito sobre el papel, no tanto al volante - Y eso que Ángel se comió casi todo el marrón -. A pesar de eso, merece la pena. El dar un concierto siempre te alegra el día. Y si no mirad que contento se veía a Andrés!
Pink Floyd, Welcome to the Machine
Comentarios
Publicar un comentario
¿y tu qué opinas?